Wagaboo

Wagaboo Fun Eating
Avenida de Bruselas 21, local 24, Centro de Ocio Diversia, Alcobendas, Madrid

• Ambiente: bueno
• Comida: buena
  
• Precio: bueno
  

El Wagaboo de Alcobendas está localizado en un centro de ocio junto a La Moraleja y existen varios más en Madrid. Está muy curioso decorado y merece la pena pasarse para verlo. Hasta donde sabemos, los dueños del restaurante son los mismo que crearon The Wok (lamentablemente adquirido posteiormente por el Grupo VIPS). Está decorado por el estudio de Ignacio García de Vinuesa: echad un vistazo a www.wagaboo.com.

De todas las veces que hemos estado, nos ha quedado un sabor agridulce, en varias ocasiones el servicio ha sido bastante malo y una vez tuvimos que marcharnos tras estar veinte minutos esperando a que nos tomaran nota y el restaurante semi vacío. Esta vez el servicio volvió a tener sus altibajos. Nos atendieron bastante bien, el camarero fue amable, pero los segundos tardaron fácilmente más de veinte minutos. Además, la carne la pedimos poco hecha y nos la trajeron, como poco, al punto. Son estos detalles los que nos hacen estar semanas sin volver por el restaurante, aunque al final siempre le damos otra oportunidad...

En la carta han añadido un apartado de sugerencias y puesto que otros platos de la carta ya los conocíamos, nos centramos en éstas. Antes de pasar a los platos comentar que nos trajeron pan, cosa que antes no ponían, y estaba rico (especialmente el de cebolla). Para compartir pedimos huevos con pisto que estaban muy buenos, y la cantidad es más que suficiente. De segundo pedimos ragú de pollo al currry (un tanto flojo el pollo y el curry) acompañado de verduras, y el solomillo al cuadrado con patatas y salsa de mostaza, que estaba bueno (especialmente la salsa) pero que para ser uno de los platos más caros de la carta tampoco dice nada, resulta un poco soso.

Para beber pedimos agua (Cabreiroá en cristal) y cerveza (Cruzcampo de barril).

No pedimos postre.

El hecho de ver a los cocineros trabajar es muy curioso ya que la cocina está a la vista tras un cristal, y es especialmente llamativo cuando trabajan la pasta (¿¿¿pero tanta pasta hacen??? siempre vemos a orientales dale que te pego con la masa... a lo mejor es un poco espectáculo). De la carta os aconsejamos los pansoti al ricotta, el tajine de pollo y la fricadele de Hamburgo. Los postres son correctos.

La cocina es creativa, la comida está bien y la relación calidad/precio es buena. Una pena el detalle del servicio. Nosotros nunca reservamos ya que llegamos siempre pronto, pero se suele llenar (hemos leído que no admiten reservas pero no lo hemos corroborado). Es un restaurante recomendable tanto para parejas como para grupos.

Calificación final: bien

La gloria

La gloria de Montera
C/ Caballero de Gracia 10, Madrid

• Ambiente: bueno
• Comida: buena
  
• Precio: bueno
  

La gloria es uno de los restaurantes en el que más veces hemos estado y es junto con la Finca de Susana, Bazaar y Public, un tipo de restaurante que nos gusta especialmente. Su principal atractivo reside en una inmejorable relación calidad/precio. De ahí las colas que se suelen formar a su puerta.

La gloria está situado en la calle Caballero de Gracia, junto al Real Observatorio del Caballero de Gracia, al lado de Gran Vía. La zona hace unos años era realmente mala, pero últimamente ha mejorado bastante, con la incorporación de nuevos restaurantes y la restauración de la propia calle. De todas formas sigue teniendo a Montera al lado. El restaurante está decorado moderno, elegante, con lámparas grandes y manteles blancos. Una pega es que las mesas están extremadamente pegadas unas a otras.

Esta vez éramos tres y decidimos compartir un solo primero, el carpaccio de salmón. Lo recordábamos con menos salsa, pero estaba bueno, acompañado de pan tostado y decorado con una bola de mantequilla. De segundo pedimos milhojas de solomillo acompañado de salsa y patatas, lubina en papillote acompañada de verduras y pesto, y bacalao al ajo. Todo estaba muy bueno (como siempre) y las cantidades son generosas.

Para beber pedimos agua (Bezoya en cristal) y vino tinto (Enate Cabernet, correcto).

De postre escogimos el crepe de manzana, que es sin duda alguna uno de los mejores postres de La Gloria, y la tarta de whisky, que viene decorada con salsa de chocolate. En cualquier caso, y para verano, la sopa de fresones es muy recomendable. Por supuesto, los chocolate-adictos pueden pedir el chocolatísimo. Cualquier postre es espectacular, es el que mejores postres tiene de los cuatro (Finca, Gloria, Bazaar, Public) .

Como ya sabréis, no se pueden realizar reservas. El personal está atento y los platos esta vez no tardaron en llegar (punto normalmente negativo en La Gloria). Lamentablemente, en esta ocasión nos pareció que nos apremiaban demasiado a ir terminando los platos. Entedemos que quieren doblar (triplicar, cuadruplicar) una mesa, pero ayer fue especialmente exagerado. De los cuatro (Finca, Gloria, Bazaar, Public) es el que peor servicio tiene.

La relación calidad/precio es muy buena. Es un restaurante recomendable tanto para parejas como para grupos.

Calificación final: bien

La Mafia

La mafia se sienta a la mesa
C/Anabel Segura 11, Alcobendas, Madrid

• Ambiente: normal
  
• Comida: normal
  
• Precio: malo
  

La mafia es una franquicia de restaurantes italianos, en realidad taberna siciliana, y en Madrid se encuentran en Alcobendas en Arroyo de la Vega. El restaurante está decorado al estilo de otros italianos (paredes pintadas con líneas verticales, cuadros de fotos de personajes italianos, un reloj antiguo, etc.). Es curioso, pero la carta no pega nada con el restaurante, es demasiado moderna. Tienen página web www.lamafia.es.

Para la espera ponen aceitunas. La carta recoge una serie de antipasti, ensaladas, crepes, pasta y pizzas más o menos tradicionales, lo que puedes esperar en cualquier otro itialiano tipo franquicia (por ejemplo en Ginos). Para compartir pedimos una ensalada de espinacas, con salsa de mostaza en grano, queso parmesano, tomate fresco y tomate seco, que estaba buena. De segundo pedimos pedimos dos pizzas, una cuatro quesos y otra parmesana que incluía jamón serrano. La masa de las pizzas era fina y estaba buena, el contenido en sí era más normal (llevan mucho queso rallado o en polvo por encima), en conjunto estaban regular. Como detalle comentar que te traen un corta-pizzas (sólo uno, para compartirlo). La cantidad es generosa. Entre plato y plato no nos cambiaron los cubiertos.

Para beber pedimos agua (Aquabona en cristal) y cerveza de barril (Mahou clásica).

No pedimos postre.

El personal está atento y no tardan en traer los platos. Nosotros fuimos sin reserva.

El restaurante no es barato, la relación calidad/precio es normal tirando a cara. Un detalle negativo es que la salida de emergencia estaba tapada por dos mesas de apoyo. No es un restaurante especialmente interesante, es una alternativa a otros restaurantes de franquicia, la comida es pasable.

Calificación final: suficiente

enBandeja

enBandeja
C/La Granja 104, Alcobendas, Madrid

• Ambiente: muy bueno
• Comida: buena
• Precio: bueno
  

enBandeja está situado en la zona industrial de Alcobendas, a cinco minutos en coche de la A-1 (salida 16). El restaurante es muy original, es una nave industrial de techos altos, y venden toda la decoración (mesas, sillas, cuadros, lámparas, etc.). Además, tienen una tienda. En verano disponen de una pequeña terraza a la entrada. Echad un vistazo a www.en-bandeja.com . Para el que le interese, tienen wi-fi.

Una caracterísitica de enBandeja es que es un restaurante para ir sin prisas por varios motivos: el principal es que los sábados por la noche se puede escuchar jazz en directo. Esta noche hemos escuchado a un guitarrista y a una cantante argentina. En otras ocasiones han tocado pianistas o tríos de cuerda y percusión.

Para la espera ponen aceitunas, pan (que lo hacen ellos y es realmente bueno) y una bola de una especie de paté de atún que está muy rico. Hacía tiempo que no íbamos y nos sorprendió ver que habían cambiado la carta y había nuevos platos de estilo marroquí, así que nos llamó la atención la pastella de pollo y la pedimos para compartir. Era parecido a la pasta brick, relleno de carne picada de pollo con especias, huevo duro, etc. y espolvoreado con canela por encima. Excelente. De segundo pedimos la lasaña de calabacín y berenjena con queso, y los lomos de atún macerado con alcachofas y arroz decorado con salsa pesto. Ambos platos estaban excelentes, muy recomendables. Además, la cantidad es generosa.

Para beber pedimos agua (nos gustó el detalle de que fuese la botella azul de Solán de Cabras) y vino blanco de Rueda (correcto).

De poste elegimos un Apfel Strudel para compartir, muy bueno, con helado de vainilla y una teja de pistacho realmente exquisita. El resto de postres nos consta que están también muy buenos.

El personal está atento y es muy agradable, tanto los camareros como el maître. A pesar de ello, el servicio no es especialmente ágil (no sabemos si es debido a la cocina), por lo que hay que tener un poco de paciencia. Recomendable tanto para grupos como para parejas. Importante realizar la reserva con suficiente antelación para los fines de semana.

El restaurante no es barato, sobre todo si se pide vino y cervezas, pero la relación calidad/precio es buena.

Calificación final: sobresaliente